dime que nada de esto es real,
que esta no es mi vida,
que todo sigue siendo como antes.
Dime que me sigues queriendo,
que sigo saltando los charcos los días de lluvia,
que sigo siendo igual de impuntual y dormilona,
que sigo viendo el cielo más azul de lo normal,
que sigo siendo la misma niña inocente y dulce que un día conociste,
que no he perdido mi inocencia,
que mis ojos siguen siendo tan azules como la primera vez que nuestras miradas se cruzaron,
y que mi sonrísa te sigue alegrando el día.
Solo dímelo,
solo mientéme.
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